lunes
El bien y el mal....
Siempre nos preguntamos si el bien y el mal existen ...o no . Si, claro que existen, dentro de cada uno de nosotros existe el bien y existe el mal, nadie es del todo bueno ni del todo malo. Hace unos años , leí un libro de Paulo Coelho, "el demonio y la señorita Prym" , asi se llama, recuerdo que empecé a leerlo un miércoles de lluvia por la noche, y terminé de leerlo el jueves por la noche, o sea, me dormí un par de horas cuando ya no podia leer del cansancio pero no pude dejar de seguir la historia, por que como dice el dicho: la curiosidad mató al gato. Y mi curiosidad era saber hasta donde el ser humano comete un acto, o procede en tal o cual situación, preguntándose si es bueno o es malo aquello que está por hacer. En este libro hay varios personajes, uno es Berta, la anciana que vivió siempre en ese pueblo, otro es Chantal que sueña algún dia irse , y el forastero ....
Me gustó leerlo, y hay una frase, no recuerdo ahora en que página del libro, creo que por la 48/ 50 , (esta frase la tengo escrita en un cuadrito pintado por una amiga, y colgado en un cuarto de mi casa) y dice asi:
“Ósea que el bien y el mal tienen el mismo rostro: todo depende de la época en que se cruzan en el camino de cada ser humano”
Les dejo la tapa del libro.
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Destruyendo al projimo/del guerrero de la luz
Malba Tahan ilustra los peligros de la palabra: una mujer tanto fue pregonando que su vecino era un ladrón, que el muchacho acabó preso. Días después, descubrieron que era inocente; lo soltaron y él procesó a la mujer.
-Hacer unos comentarios no es algo tan grave - dijo ella al juez.
-De acuerdo -respondió el magistrado- . Hoy, al regresar a su casa, escriba todo lo que habló mal sobre el joven, después pique el papel y vaya tirando los trocitos por el camino. Mañana vuelva para escuchar la sentencia.
La mujer obedeció y volvió al día siguiente.
-Está perdonada si me entrega los pedazos de papel que tiró ayer. En caso contrario, será condenada a un año de prisión- declaró el magistrado.
-Pero eso es imposible! ¡El viento ya ha dispersado todo!
-De la misma manera, un simple comentario puede ser esparcido por el viento, destruir el honor de un hombre y después es imposible arreglar el mal ya hecho.
Y envió a la mujer a la cárcel.
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